El Lobo aulló más fuerte que todos y se consagró campeón absoluto del básquet provincial en 2024
GEPU derrotó este viernes por la noche a Jorge Newbery en condición de visitante en el segundo juego de la final. Había ganado en el Emilio Perazzo por 69-61 y con un 84 a 70 cerró una temporada ideal al adjudicarse el Apertura y Clausura.
GEPU otra vez se consolidó como el mejor equipo de la provincia. El Lobo había ganado el Torneo Apertura el 28 de junio al derrotar en el segundo juego a Guaycurú en el estadio “Profesor Omar Bazán” por 71 a 55. Al primer punto lo consiguió de local con una victoria de 74 a 63.
En aquella ocasión, los dirigidos por Claudio Díaz tuvieron la efectividad de sus goleadores Federico Alaníz y Santiago Ferrer y la rigidez defensiva de los hermanos Juan y Agustín Garro.
Para el Clausura, no hubo demasiadas modificaciones en cuanto a nombres y el juego siguió siendo aplastante de principio a fin. En semifinales volvieron a derrotar a los “Indios” y en la final se encontraron con un Jorge Newbery que venía de ganar el clásico villamercedino ante Alberdi.
El primer partido en el estadio Emilio Perazzo de la ciudad de San Luis fue para los locales que triunfaron por 69 a 61.
La revancha fue anoche en el Microestadio Aurinegro. El técnico de Jorge Newbery, Carlos Aguilar, paró en cancha a Facundo Silvestre, Leonardo Sosa, Agustín Maldonado, Luis Lucero y Valentino Destefanis de arranque para buscar la remontada.
Los de Díaz salieron a la cancha con Esteban Domínguez, Martín Becerra, Federico Alaníz, Valentino Olivella y Juan Garro.
Los de la ciudad capital sacaron una diferencia de solo un punto en el primer cuarto. Fue 17 a 16. Al descanso, se fueron igualados en 30 en un partido no apto para cardíacos.
En la segunda mitad, el Pitojuan buscó igualar la serie y definir al campeón en un tercer juego, pero la obligación de ganar generó desesperación, nerviosismo e inquietud en sus jugadores que no pudieron ante la experiencia y mayor contundencia de GEPU.
46 a 44 llegaron a los últimos 10 minutos de partido que tuvieron en vilo al público presente. En una rafaga de efectividad, el Lobo sacó la diferencia y selló el triunfo con un 84 a 70.
El máximo anotador y quien marcó la diferencia en el juego fue el capitán de GEPU, Federico Alaníz que marcó 30 puntos y los claves en la recta final.
“Fue un partido duro como toda final, sabíamos que podíamos sacar diferencias desde lo físico y así fue. Creo que dominamos durante todo el partido, tomamos buenas decisiones y supimos aprovechar las ventajas.Nos quedamos con la victoria porque fuimos superiores, con un gran juego, intensos en defensa y dinámicos en ataque, nos pasamos muy bien la pelota y tomamos buenos lanzamientos”,destacó Alaníz a El Chorrillero.
La figura del campeón acerca de sostener el nivel y ser inexpugnables a lo largo del año, comentó que en relación al resto de los equipos los diferenció la intensidad y que una vez que GEPU logra imponer el ritmo, saca la diferencia levantando la cantidad de posesiones para poder tomar más lanzamientos.
Asimismo, afirmó que lo más importante es el grupo. “Es lo más fuerte que tenemos, un equipo muy joven que tiene muchas ganas de aprender y competir. Estamos muy contentos, felices y nos genera satisfacción porque son muchos chicos del club que demostraron estar a la altura de un torneo provincial. Hay que seguir por este camino y apostar a los jóvenes”, sostuvo Alaníz.