El primer paciente trasplantado por el sistema de salud pública fue dado de alta

El 22 de noviembre el sistema de salud pública de San Luis realizó en el Hospital Ramón Carrillo por primera vez un trasplante. Walter Sebastián Avaca de 41 años que se encontraba en la lista de espera desde hace cuatro años recibió un riñón. La intervención fue exitosa y tras permanecer siete días en la sala de cuidados moderados, hoy obtuvo el alta médica.

La operación tuvo una duración de aproximadamente tres horas y sin complicaciones. Los primeros controles por imágenes mostraron el correcto funcionamiento del órgano.

El procedimiento fue llevado a cabo por el equipo de ablación e implante del hospital público, y el seguimiento fue realizado por profesionales y técnicos del propio centro de salud.

Avaca salió de la sala en sillas de ruedas acompañado del personal médico que realizó la intervención y fue recibido por su pareja Betiana, su madre Mary y su hijo Bastian que en sus manos tenía un cartel que decía “bienvenido”. También estuvieron el gobernador Claudio Poggi junto a la ministra de Salud, Teresa Nigra.

“No quería dejar pasar la oportunidad para saludar a Walter, el sanluiseño que recibió el primer trasplante renal de la historia de la provincia. Gracias a Dios, por los informes médicos, me dicen que está muy bien. Hoy le dieron de alta, tiene que cuidarse mucho, por supuesto. Quise venir para saludar también a los médicos, a los enfermeros, a los técnicos, a los bioquímicos, a todos los que se prepararon desde principios de año para este trasplante y para muchos más que van a venir seguramente”, expresó el primer mandatario.

Para que la operación pudiera realizarse todo el equipo médico se capacitó y trabajó arduamente para poder lograrlo. “Esto es un primer paso, que genera una luz de esperanza para hombres y mujeres de San Luis que padecen enfermedad renal crónica. El reencuentro con su madre, con su familia, nos llena de alegría y esperanza”, señaló.

La pareja de Avaca, contó que un mes atrás los llamaron para realizar el trasplante en Mendoza, pero el jueves pasado todo cambió cuando recibieron la noticia de que la operación se podía hacer en San Luis.

“Ayer las enfermeras nos dijeron que era muy probable que hoy nos dieran el alta y así fue. Estamos muy contentos, porque ya queríamos estar en nuestro hogar con nuestra familia. Es un cambio de vida”, dijo Betiana en declaraciones que formuló a El Chorrillero.

El hombre que recibía diálisis tres veces por semana se encuentra transitando una buena recuperación.

“Estamos muy agradecidos con el Hospital Central, con su personal, con los profesionales médicos y cirujanos. El acompañamiento ha sido excelente, tanto para él como para la familia. Nosotros y toda la gente del hospital estamos muy felices. Estamos muy felices por este paso en la salud pública”, dijo la mujer.