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El sentido adiós de los fieles puntanos al Papa Francisco: rezo en su nombre y un legado que perdurará

El obispo Gabriel Barba encabezó las oraciones en memoria del sumo pontífice. Los feligreses agradecieron que haya sido argentino. También pidieron por el próximo Papa que será elegido en Roma.

El sonido de las cuentas del rosario, rostros de tristeza como si un familiar hubiera partido y el sentimiento de nostalgia copó la Parroquia de Santo Domingo durante el mediodía. El motivo fue claro: rezar por el Papa Francisco, agradecer su labor como cabeza de la Iglesia Católica y pedir por el próximo sumo pontífice.

Es que la muerte de uno de los líderes espirituales, políticos y culturales del siglo XXI atravesó el mundo. San Luis no fue menos y el obispo Gabriel Barba convocó a una oración en su memoria.

Asistieron religiosos, monjas y estudiantes de primaria y secundaria del Instituto Santo Tomás de Aquino.

“Rezamos por las intenciones del Papa, por los migrantes, por los desplazados, por quienes escapan de la guerra. También por los más pobres, por quienes más necesitan. Todos aquellos que siempre tuvieron un lugar en el corazón del santo padre”. De esa manera abrió Barba.

La oración fue en la Parroquia de Santo Domingo. (Foto: Aldo Marchiaro).

Cada Padre Nuestro, cada Ave María, fue sentido.

En el medio, el obispo leyó un escrito en honor a Jorge Bergoglio titulado “no renunciaste”: “No renunciaste al contagioso buen humor. No renunciaste llegar a tantos y tan diversos territorios del mundo, al diálogo sin fronteras, al amor al prójimo y la paz”.

La foto final fue Barba con los más pequeños del colegio junto a un retrato del Papa y la imagen de la Virgen Nuestra Señora del Rosario del Trono.

“Francisco dejó un camino de una Iglesia de puertas abiertas, menos clerical, donde todos participan y es más cercana a los pobres. Trajo un aggiornamiento, oxígeno, limpieza, libertad, hizo mucho bien al mundo. Me conmocionó el lugar que le dio a la paz, al fin de las guerras, al desarme. Ojalá que siga esa llama viva”, sostuvo el monseñor en un contacto con la prensa.

El rezo de los feligreses. (Foto: Aldo Marchiaro).

Antes del rezo comentó que “todos estamos sensibilizados” y colmados de un sentimiento de melancolía. “Cada día que pasa es un día para recordar lo que tuvimos, lo que vivimos”, indicó.

A su vez, destacó las transformaciones que trajo consigo: “Fue el único jefe de Estado que se opuso abiertamente, militantemente, contra la guerra, contra las armas, a favor de los pobres, del cuidado de la naturaleza, de una economía sustentable”.

“Dentro de la Iglesia ha tenido mucha audacia de tomar decisiones que otros no las ha tomado en cuanto a la economía, la transparencia de las cuentas del Vaticano. E incluso poner en lugares de mucha importancia a mujeres. Hoy están a cargo de lugares claves. Fue muy audaz”, puntualizó.

Para Vicente, un creyente y seguidor de Jorge Bergoglio, la muerte significó “la pérdida de un padre”: “Quedamos huérfanos. Fue el Papa de los pobres. Se acercó mucho a todos los marginados y por eso todos los humildes hoy nos sentimos tristes”.

“Nos sentimos huérfanos porque sobre todo era argentino. Cumplió su misión aquí en la tierra y como Papa, lo guio el Espíritu Santo”, sostuvo y rezó para que su sucesor “siga la misma línea”. “Hay muchos católicos que se habían alejado y con Francisco regresaron”, completó.

Las cuentas de un rosario en el rezo por el Papa Francisco. (Foto: Aldo Marchiaro).

En el mismo sentido se expresó Isabela: “Para mí fue la confirmación de una vocación de servicio, de un testimonio muy claro de la opción preferencial por los pobres. Trabajé en Cáritas. Su magisterio, su enseñanza y su testimonio en obras, en actos, nos hizo tomar conciencia de que aquí nadie se salva solo, que la solidaridad es un valor”.

“Él habló mucho sobre el gran pecado de estos tiempos que es la indiferencia. El pasar de largo. Él escribió una hermosa carta, ‘Hermanos todos’, de mucha enseñanza social.  Y nos puso la imagen de Jesús que no pasa de largo ante ese hombre medio muerto”, aseveró.

Y se detuvo en el alcance de la figura de Francisco: “Lo vamos a ver con el tiempo. Escucho los testimonios ahora, después de su fallecimiento, y mucha gente que no es católica se ha sentido convocada y conmovida por el mensaje del Papa”.

“Los católicos todavía tenemos que rumiar mucho más su legado porque él nos ha invitado, como Francisco de Asís, a vivir el Evangelio sin glosa, sin subtitulados, a ser simples, sencillos, cercanos y alegres, a testimoniar la presencia de Dios en este mundo”, agregó.

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