Constelaciones familiares, Reiki, Sanación de Útero y Barra de Acces: ¿De qué se tratan estas disciplinas alternativas?
Ante la creciente oferta de terapias alternativas, surge la necesidad de información clara y precisa explicando sus principios y beneficios potenciales, sin reemplazar la consulta médica convencional.
Las constelaciones familiares, el reiki, sanación de útero y las barras de Access han ganado visibilidad recientemente, aunque a menudo desconocemos su verdadero significado y propósito. Estas prácticas, comúnmente denominadas “terapias alternativas” o erróneamente “terapias holísticas”, se presentan como alternativas a la medicina tradicional y tienen raíces en civilizaciones antiguas, como la de los incas, quienes utilizaban plantas para sanar y organizaban sus vidas según la numerología y la astrología que les era propia.
Cientos de años después, muchos de estos métodos han evolucionado y se han adaptado a los tiempos actuales, coexistiendo junto a lo “científicamente comprobable”. Gran parte de esta vasta información se pierde entre la abundancia de datos, lo que nos deja más confundidos que nunca.
Para aclarar un poco más el concepto, las terapias complementarias y alternativas, a veces denominadas medicina complementaria e integral, son tratamientos que no son parte de la medicina estándar, como la acupuntura o la quiropráctica. En este marco, es más que necesario aclarar que las complementarias complementan a los tratamientos médicos convencionales, pero no reemplazan para nada el tratamiento médico.
En este último tiempo, en San Luis, cada vez más personas se inclinan a experimentar estas nuevas alternativas que colaboran con el bienestar emocional y espiritual de las personas.
Constelaciones familiares
La terapia de constelaciones familiares es una herramienta que trabaja con el sistema familiar del consultante para abordar cualquier síntoma físico, mental o emocional. En cada sesión, la situación que la persona vive como un problema es representada a nivel espacial para identificar cuáles son los desórdenes que hay en las dinámicas que rigen su vida.
La consteladora Cintia Videla explicó a El Chorrillero que “es una técnica terapéutica creada por Bert Hellinger, un psicoterapeuta alemán. Esta metodología se basa en la idea de que todos estamos profundamente conectados con nuestros antepasados y con los patrones familiares que influyen en nuestras vidas. A través de esta técnica, los pacientes pueden identificar dinámicas sistémicas ocultas que afectan sus relaciones y bienestar emocional”.
La constelación, que puede realizarse de manera individual o grupal, permite a los participantes visualizar y comprender las influencias del pasado en su presente, utilizando figuras representativas para simbolizar a los miembros de la familia. Esto ayuda a traer a la luz patrones emocionales, traumas y bloqueos que pueden haber sido transmitidos de generación en generación.
En el mismo sentido, aseguró que los participantes reportan diversos: “Muchos sienten una liberación emocional como si se desprendiera de cargas que han estado llevando. A su vez la autocomprensión de la experiencia permite a las personas comprender mejor su lugar en su sistema familiar y deseos de sanación. Otro punto es la transformación de patrones ya que comienzan a comprender sus patrones con el inicio a cambios en su entorno y relaciones”.
Sanación de útero
En la misma línea, Videla ahondó sobre esta práctica ancestral que “se basa en iniciaciones chamánicas que buscan ayudar a las mujeres a reconectar con su sagrado femenino, despejando el miedo y el dolor para crear espacio para la vida y la creatividad”.
El rito del útero fue transmitido a través de un linaje ancestral que promueve la sanación y la conciencia del cuerpo femenino. “El útero no es un lugar para guardar miedo o dolor, sino un espacio para crear y dar luz a la vida”, enfatizó. Sostuvo que este proceso no solo impacta a la persona que lo recibe, sino que también sana a siete generaciones hacia atrás y hacia adelante, creando un vínculo intergeneracional profundo.
La sanación de útero se realiza en círculos de mujeres, donde cada participante tiene un papel activo en el proceso. “Primero se levantan las manos y se repite el mantra, luego se apoya la mano en el bajo vientre, transmitiendo la energía sanadora a la persona frente a ti", explicó Videla.
Además, se utilizan cuarzos rosas para trabajar de manera individual, creando un equilibrio entre el chakra sexual y el corazón, uniendo así el poder creativo y emocional.
Reiki
Esta disciplina se ha posicionado como una más relevante en la búsqueda de equilibrio y bienestar en un mundo acelerado. Con raíces en civilizaciones antiguas, su práctica se centra en la armonización de la energía vital que fluye a través de nuestro cuerpo.
Esta técnica, a menudo catalogada como una terapia alternativa o complementaria, se basa en la transferencia de energía entre el practicante y el receptor, facilitando un flujo energético sin manipulación física.
La reikista Stefanía Castagnero explicó que unos de los conceptos fundamentales de esta técnica son los chakras que son centro de energía en el cuerpo humano: “Todas las personas contamos con estos puntos energéticos que son raíz, sacro, plexo solar, corazón, garganta, tercer ojo y corona”.
Durante una sesión, el receptor se encuentra acostado y relajado, mientras que el terapeuta canaliza energía a través de sus manos en posiciones específicas. La práctica busca generar una profunda sensación de paz y bienestar.
Definió al reiki como "una técnica de relajación que permite a las personas habitar su entorno con mayor calma y paz. Cada experiencia de Reiki es única, dependiendo de la apertura del paciente y de la habilidad del practicante”.
Para quienes consideran probarlo, Castagnero aconsejó “elegir cuidadosamente al terapeuta y confiar en el proceso, ya que la esencia del Reiki es la vibración del amor”.
Barra de Acces
Las Barras de Access fueron desarrolladas en Estados Unidos en la década de 1990 como parte de Access Consciousness, un sistema diseñado para facilitar el acceso a una mayor conciencia. Su creador, Gary Douglas, se inspiró en un proceso intuitivo que lo llevó a descubrir 32 puntos específicos en la cabeza que, al ser tocados suavemente, liberan bloqueos energéticos relacionados con diferentes aspectos de la vida. La técnica ofrece una alternativa a la acupuntura, utilizando manos en lugar de agujas.
Desde un enfoque práctico, funcionan mediante un contacto suave en los puntos que almacenan pensamientos, emociones y creencias. Este toque ligero permite liberar las cargas acumuladas, promoviendo un bienestar similar al de reiniciar una computadora para mejorar su funcionamiento. Durante una sesión, el participante se recuesta cómodamente mientras el practicante activa los puntos en la cabeza, guiándose por su intuición.
La practicante, Paulina Corvalán reveló que “los beneficios de las sesiones son variados y notables: reducción del estrés, mayor claridad mental, mejor descanso y cambios positivos en los patrones de pensamiento y emociones”.