DEFENSORA OFICIAL, AGUSTINA TOBARES
“No es un monstruo, es una mujer marcada por la violencia y el sufrimiento”
La defensora oficial, Agustina Tobares, aseguró que la ex policía atravesó una vida de violencia, soledad y colapso emocional que nubló su juicio al momento del crimen.
“Vengo a pedirles que miremos más allá del hecho y dejemos por un momento de lado esa imagen inhumana”, expresó Tobares en su alegato de clausura. “Marina es una persona con una historia marcada por el sufrimiento, el sometimiento, la soledad y una violencia que desconoce de límites”, agregó.
La defensora repasó los antecedentes de violencia de género sufridos por Silva, los informes psicológicos y la condena previa contra su ex pareja Jonathan Funes, padre de uno de los niños. Sostuvo que su defendida padecía un trastorno depresivo mayor y una personalidad dependiente, y que la noche del crimen “su conciencia estaba viciada por una carga emotiva negativa”.
“Marina estaba convencida de estar salvando a sus hijos de un porvenir devastador”, afirmó, y pidió al Tribunal que “analice el caso con perspectiva de género" y sin los prejuicios que la reducen a un "monstruo".
El Tribunal de Juicio la declaró culpable y le impuso prisión perpetua por el homicidio doblemente calificado de sus hijos, Sofía y Bautista.