Buenos Aires: el regreso a clases en febrero "va a estar supeditado a la situación epidemiológica"
El ministro de Salud de la ciudad dijo que el gobierno porteño tiene "todas las expectativas de alcanzar ese objetivo" ante "una curva que está sistemáticamente descendiendo", y que trabajarán "intensamente para mitigar al máximo un rebrote".
El ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, señaló esta mañana que el regreso a clases presenciales el 17 de febrero en la ciudad de Buenos Aires "va a estar supeditado a la situación epidemiológica de ese momento", consignó Télam.
"El inicio de clases el 17 de febrero en todos los niveles es a lo que estamos apuntando, pero va a estar supeditado a la situación epidemiológica de ese momento", señaló el titular de la cartera sanitaria capitalina durante el reporte de los datos de la ciudad de Buenos Aires.
Y en caso de que se concrete, "buscaremos la forma de hacerlo de manera segura cuidando la salud de estudiantes, docentes y trabajadores", añadió.
Tras brindar brindar datos y mostrar que la curva de casos "se encuentra en constante descenso", pasando de 1.300 diarios promedios a fines de agosto a "entre 400 y 500 diarios promedios casos las últimas semanas", Quirós consideró que el desafío ahora es "mitigar o evitar el rebrote como está sucediendo en Europa".
Para este fin, el ministro señaló tres acciones: "el comportamientos social sigue siendo muy importante, hay que identificar que el tema no se terminó y hay que sostener cuidados básicos".
En referencia al accionar del Estado, indicó que "es clave seguir con la investigación, rastreo y testeo para identificar potenciales rebrotes", y remarcó la importancia de "no generar nuevos canales sociales, es decir evitar los espacios supercontagiadores que son cruces de familias o personas en lugares cerrados con pequeños volumen de aire".
"Europa no pudo sostener estas tres variables. El rebrote no se evita con la aparición de la vacuna, que se va a aplicar a 10 millones de personas que son las de mayor riesgo y lo que hace es evitar formas graves o mortales de los grupos más vulnerables, pero eso no significa que evite el rebrote porque el virus puede correr perfectamente por el resto de los ciudadanos", enfatizó Quirós.
Y continuó: "De manera que la estrategia de cuidado del rebrote tiene que se independientemente de que la vacuna pueda llegar".
Consultado sobre el viaje a Rusia de una delegación argentina encabezada por la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti, para interiorizarse sobre la vacuna contra el coronavirus Sputnik V, Quirós señaló que "es muy valioso el viaje" debido a que "hay que trabajar con todos lo fabricantes y Gobiernos para tener los lazos, los acuerdos y los posibles contratos" para que una vez que se complete la fase III de las vacunas candidatas Argentina tenga acceso.
El ministro recordó que hay 11 vacunas candidatas que se encuentran en esta fase que consiste en una prueba con una cantidad importante de voluntarios a quienes se les aplica la vacuna y se compara si se enfermaron menos y en formas menos grave contra un grupo al que se le administró placebo.
"También hay que medir la seguridad, es decir, los efectos adversos a corto y mediano plazo", señaló, e indicó que "hasta que estos resultados científicos de la fase III no estén, no se puede definir qué vacuna vamos a usar ni cuándo vamos a vacunar".