Asesinaron al actor Eddie Hassell, conocido por su trabajo en “The Kids Are All Right”
El joven, de 30 años, fue acribillado en la ciudad de Grand Prairie, Texas, en la puerta de la casa de su novia.
El actor Eddie Hassel, conocido entre otros trabajos por su participación en la película The Kids Are All Right, candidata a cuatro Oscar, fue asesinado en la madrugada del domingo en Texas, Estados Unidos. Tenía 30 años.
De acuerdo al sitio de la revista Variety, el actor fue acribillado luego de resistirse al robo de su auto. El representante de Hassel aseguró a ese medio que la Policía investiga si el crimen tuvo que ver con el intento de asalto o con otras circunstancias no determinadas.
Según la cadena CNN, la policía de la ciudad de Grand Prairie, Texas, aseguró en un comunicado que respondieron a un tiroteo y encontraron a Hassell con heridas de bala. El joven murió en el trayecto al hospital. The New York Times confirmó que la escena del crimen fue frente al departamento de su novia en Grand Prairie, un suburbio de Dallas.
Hassell había nacido el 16 de julio de 1990 en Corsicana, Texas. Interpretó varios papeles secundarios durante las décadas de 2000 y 2010. Su figura trascendió a partir de su rol de Clay en la película de 2010 The Kids Are All Right, protagonizada por Julianne Moore y Mark Ruffalo. Además, participó en el programa de la NBC Surface y en la serie Devious Maids, en 2013, dos de sus trabajos más conocidos.
El actor también hizo apariciones en programas de televisión como Studio 60 en Sunset Strip, Jimmy Kimmel Live!, Oliver Beene, Joan of Arcadia, ‘Til Death, Southland, Longmire y la reconocida Bones.
Además de The Kids Are All Right, Hassell también interpretó papeles en películas como 2012; The Family Tree, la biopic de Steve Jobs de 2013, Jobs; Family Weekend, con Kristin Chenoweth y Joey King; House of Dust; Warrior Road y Bomb City, que en 2017 ganó el premio del público a la mejor película narrativa en el Festival Internacional de Cine de Dallas. Su crédito más reciente fue en ¡Oh Lucy! donde tuvo el rol de un mozo.
Más allá de la actuación, Hassell era un fanático del surf y de practicar skate. En una entrevista de 2013 con Elle, opinó sobre sus hobbies: “El skate siempre fue una gran parte de mi vida y también me hizo trabajar en comerciales. Me gustaban los paseos a caballo y los rodeos en Texas y cuando me mudé a Los Ángeles empecé a practicarlo. Hice todas las acrobacias que pude y por eso me gusta cualquier cosa con una tabla: surf, wakeboard”.