El robo de motos no se detiene: así asaltaron a un delivery en el Barrio 1° de Mayo
Simularon ser los clientes, lo apuntaron con un arma y le quitaron hasta el rodado que usaba todos los días para trabajar. Este tipo de delitos se está incrementando en la ciudad. Todos los casos trascienden por las redes sociales.
Desde hace un tiempo los repartidos de comida vienen siendo víctimas de los delincuentes. Diego Camargo, de 44 años fue uno de los afectados esta semana.
En diálogo con La Mañana de Radio Dimensión dio detalles del violento momento que vivió.
El martes por la noche fue atacado por dos ladrones cuando iba a llevar un pedido al Barrio 1º de Mayo. Fu una mujer la que hizo el pedido, y en un segundo llamado pidió que le alcanzaran la comida hasta la plaza.
“Cuando llegué a ese lugar veo que en la parada de colectivo un joven me hacía señas con la linterna del celular. Me dirigí hacia donde estaba, le entregué la comida y le dije el monto que me tenía que abonar”, explicó Camargo.
En ese momento apareció otro muchacho. Justo ahí lo apuntaron con un revólver.
El delincuente estaba “bastante nervioso”, y Camargo le entregó todo lo que tenía en su poder: billetera, celular, el pedido y hasta la motocicleta: una Keller 110, de color negra.
Lo dejaron sin nada. Pero lo que más le duele es la moto. Él contó que por la mañana trabaja en el Plan de Inclusión Social, y por la noche se dedica al delivery.
Luego del asalto, unos vecinos lo ayudaron y le prestaron el celular para llamar a la Policía: “Después de 45 minutos apareció un agente y me llevó a la Comisaría 4° para efectuar la denuncia”.
Inseguridad sin freno: otro robo en la capital
Este sábado, un agente de Policía (aún no incorporado a la fuerza) sufrió el robo de su moto. Fue en el Barrio 544 Viviendas, entre las calles Tomas Cuello y Maximiliano López.
Giuliana Arce, la pareja del damnificado le contó a El Chorrillero que lo primero que hicieron fue publicar en las redes sociales para que alguien ayude a ubicar el rodado. Es una Motomel 150, de color negro.
“Mi pareja fue al cumpleaños de su amigo y cerca de la 5 de la madrugada se percató que ya no estaba más”, mencionó Arce.
El hombre usaba el rodado para repartir tortitas.
Horas más tarde realizó la denuncia en la Comisaría 3°.