Entre un 40% y un 50% del personal de salud de las clínicas privadas no fue vacunado
Por la lenta campaña de inoculación dentro del sistema sanitario puntano, un gran porcentaje de trabajadores del sector todavía no recibieron ni siquiera la primera dosis.
Por Julián Pampillón
Este jueves profesionales y personal de salud de diferentes clínicas privadas de la ciudad de San Luis se manifestaron en los ingresos de las instituciones por el lento plan de vacunación contra el coronavirus que lleva adelante el Gobierno provincial.
A través de un relevamiento que hizo El Chorrillero de los principales centros de salud (Sanatorio Rivadavia, Ramos Mejía, Cerhu y Clínica Italia) surge el dato que, en promedio, resta inmunizar a 43% de los trabajadores.
Esta información va en contra de lo expuesto por la ministra de Salud provincial, Silvia Sosa Araujo.
“Todas las personas que están en primera línea, tanto público como privado están vacunadas, nosotros del total de inscriptos tenemos más de 90% vacunados”, había dicho la funcionaria en declaraciones a la prensa.
A San Luis, como en todas las provincias, las vacunas llegan a cuentagotas: hasta la fecha se recibieron 98.850 vacunas y se aplicaron 92.359. Aunque hay que aclarar que son destinadas para los grupos de riesgos y prioritarios (salud, seguridad, docentes, mayores de 70 y 80 años y aquellos que padecen enfermedades crónicas).
Los pedidos y protestas de los profesionales se dan en un contexto de estrés sanitario en medio de una segunda ola. En el último reporte, el Comité de Crisis informó 630 casos. Hace 14 días atrás se registraron 237 positivos. Esto significa un crecimiento del 167% en el último tiempo.
El jefe de Recursos Humanos del Ramos Mejía, Julio Jodas dio detalles del proceso de inoculación de ese lugar: solo el 24% de los profesionales recibieron ambas dosis, un 34% una sola y al otro 42% no se les aplicó ninguna.
“Hice las gestiones necesarias para que cada uno recibiera las dosis. Faltan vacunar el personal administrativo, enfermeros, camilleros, porteros, choferes de ambulancia que son contacto con pacientes desde que ingresa hasta el final”, sostuvo Judas en declaraciones a este medio.
Desde el Sanatorio Rivadavia, la instrumentadora quirúrgica, Fernanda Villegas manifestó a El Chorrillero que el 50% del personal está sin vacunar.
“Tenemos casi todas las habitaciones con pacientes con Covid y dos en terapia intensiva”, aseveró.
El encargado de Covid-19 dentro de la Clínica Italia y Cerhu e infectólogo, Sebastián Correa explicó que en ambas entidades médicas restan que la reciban el 40% del personal.
En cada centro de salud mencionado se encuentran desempeñando tareas entre 100 y 150 personas, entre ellas, médicos, kinesiólogos, enfermeros, administrativos, mucamas, etc.
Los problemas en la campaña local no solo afecta al sector privado sino que también al sistema público.
La secretaria general de la Asociación de Profesionales y Técnicos de la salud (APTS), Anal Lía Trifiró subrayó que al menos 200 afiliados “no recibieron ninguna aplicación”.
El gremio confeccionó un listado para elevarlo prontamente al ministerio de Salud de la provincia.
El gobernador Alberto Rodríguez Saá contó a finales de enero, que “con todo el sistema de salud vacunado ahora la provincia avanza en la vacunación de los adultos mayores de 60 con enfermedades de base y el sistema docente”.
Lo cierto es que la vacuna todavía no llega a todos los rincones de la salud de San Luis.