Otra vez el kirchnerismo de San Luis dice que va a construir viviendas
Año por medio en la previa de las elecciones los puntanos son destinatarios de anuncios rimbombantes por parte del Gobierno.
En cada campaña el gobernador Alberto Rodríguez Saá da un golpe efectista con una batería de compromisos que después en su mayoría se desvanecen y quedan en la nada.
Pero hay una promesa que se ha transformado en una estafa a la esperanza de los ciudadanos: saca de la galera la promesa de los planes de viviendas.
Apertura de inscripciones, terrenos y líneas de créditos para refacciones, forman parte de la estrategia que replica el Gobierno de Alberto Rodríguez Saá cada dos años. Ocurrió en el 2017 cuando junto a su hermano mayor fueron candidatos a senadores nacionales, se repitió en el 2019 en la campaña por la cuarta gobernación, y vuelve a suceder en este 2021, en medio de la campaña para renovar cargos nacionales.
Sin embargo, sus gestiones al frente de la Provincia se caracterizaron por no contar con una política habitacional.
| 2017
“Habrá viviendas solidarias para lo que menos tienen, acceso a terrenos para quienes construyan. Además, podrán hacer arreglos y ampliaciones de viviendas quienes ya tengan las suyas. Habrá otro para la construcción de casas para quienes tienen ingresos medios”, fue parte de lo que Rodríguez Saá aseguró.
Ese 1° de abril en la apertura de sesiones ordinarias en la Legislatura anticipó un plan para que mujeres vulnerables pudieran acceder al techo propio.
“También habrá planes para las entidades intermedias, ONGs y sindicatos. Las familias puntanas deben sentir que el derecho a la vivienda digna es un sueño que se cumple”, dijo en ese discurso. Todo quedó en palabras.
En la previa a las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) del mismo año avisó que llamaría a inscripciones para los hogares. En un acto en Justo Daract, donde estuvo acompañado de su hermano, firmó seis decretos.
En el censo habitacional de ese año se inscribieron más de 60 mil personas que problemas. El Gobierno después minimizó el déficit al considerar que 47518 ciudadanos registraban problemas.
En esa oportunidad la propuesta estuvo dirigida a familias humildes, a las de clase media y también a personas solas. A eso sumó un plan de créditos para aquellos que cuentan con un terreno y quisieran construir su casa; una modalidad crediticia para refaccionar y arreglar sus viviendas con montos hasta $50 mil; y otra con préstamos de hasta $100 mil para aquellos que pretendan ampliar sus inmuebles.
Los meses transcurrieron y no hubo novedades sobre todos los programas que había prometido.
| 2018
En octubre llamó a licitación para edificar 1322 casas en 46 ciudades, pueblos y parajes. Algunas todavía no fueron entregadas y no se sabe quién serán los beneficiarios.
| 2019
"`El Alberto` construyó y construirá muchas casas. ¿Quién creen que las va a hacer a las viviendas? Damos certeza, nunca hablamos de más, mejor que decir es hacer, mejor que prometer es realizar", afirmó a mediados de año el gobernador. Fue en el marco del proceso electoral para renovar la gobernación de la provincia.
Ese año tampoco se cumplieron los anuncios de Rodríguez Saá y cerró su mandato con movilizaciones en Terrazas del Portezuelo donde cientos de personas se acercaron a buscar una solución.
| 2020
A pesar de la pandemia, continuaron los reclamos de quienes tenían cuotas pagas y querían una respuesta. En ese contexto, hubo entrega de casas sin aviso previo, donde no se publicaron los adjudicatarios.
| 2021
Este año, de cara a las nuevas elecciones legislativas, retomó la estrategia y apuntó a la necesidad habitacional. En marzo, junto al ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat del Gobierno nacional, Jorge Ferraresi firmaron la adhesión de la provincia al Programa Casa Propia. La Nación se comprometió a financiar 1200 viviendas.
Ese convenio fue uno de los puntos que comunicó en la apertura del período legislativo: “Cuando construyamos viviendas en municipios poco poblados y parajes, lo vamos a proyectar para que sean viviendas chacras, de media o una hectárea, para que en la propiedad se pueda realizar actividades de huerta o producción, es decir, que genere un movimiento económico”.
Un poco más de mil casas se edificaron en los últimos seis años. En 2017 ya había más de 60 mil personas con demandas insatisfechas.
El 8 de julio en la Cámara de Diputados, la jefa de Gabinete Natalia Zabala Chacur dijo que “en ningún momento existió un compromiso de construcción de 60 mil viviendas”, y afirmó que “de hecho no existe esa cantidad de aspirantes en la categoría viviendas sociales”.
Y desentendió al Gobierno de la convocatoria de hace cuatro años: “se realizó a fin de conocer la situación habitacional de la provincia para luego analizar el cumplimiento de los requisitos y de este modo determinar la real demanda”.
El último miércoles, tras la derrota del Frente k Fuerza San Luis en las PASO, Rodríguez Saá anticipó que “planteará” al Consejo Económico y Social “abrir un plan de vivienda para todas las necesidades”.
A siete semanas de las elecciones legislativas se repite la historia.