Los aprietes y la persecución de la intendenta de Renca denunciada por fraude

Un video registró parte del mensaje que dio Romina Perata el día que cerró su campaña electoral. La filmación termina siendo la síntesis de cómo se vivieron los días previos a la elección, donde se propuso ganar a cualquier costo en un ejido donde habitan unas 250 personas. Usó siempre un tono amenazante, y entre otras cosas anticipó que los empleados que no la apoyaran iban a quedarse sin trabajo.

“Mi papá me dijo que no sea agresiva, pero lo voy a ser; mientras viva un Peralta en Renca ningún Martínez va a gobernar Renca”, dijo para apuntar a su contrincante. La jefa comunal es hija del ex intendente (del mismo pueblo) Claudio Peralta, quien estuvo detenido en enero de 2016 por el delito de “tentativa de homicidio” en contra un empleado de su empresa. La jueza Patricia Besso le concedió la libertad “bajo fianza”, cuatro meses después.

Anyelén Martínez, la candidata por el Movimiento Renovación Chacabuco que quedó segunda en la elección, no tardó mucho en denunciar el fraude. Junto a un grupo de vecinos viajó hasta la Justicia Electoral, en la ciudad de San Luis, y expuso las irregularidades que tuvo todo el acto democrático. “Nosotros no elegimos a nuestros representantes”, acusó.

La campaña electoral tuvo aprietes y persecuciones en la localidad del Cristo de Renca, una tierra no solo religiosa sino también histórica. “Hay que trabajar para todos, sumar votos”, expuso peralta el último día de campaña, y tiró una advertencia para “apretar” a los empleados: “Va a haber algunas bajas dentro del municipio”.

“Si hay algún inteligente ahí, el lunes puede ir presentando la renuncia. Acá van a estar los que me acompañaron y los que me fueron fieles. El resto se tiene que ir”, dijo para indicarles a los empleados. Pero fue un poco más allá: nombró directamente a un ciudadano (de apellido Bianchi). Sobre él dijo que “tendrá que irse de Renca”.

Teniendo en cuenta los datos provisorios que publicó el Gobierno de San Luis a través de la web, fueron 594 los votantes. Se habilitaron dos mesas.

De ese total, 306 sufragios (52,40%) fueron para Peralta, la representante del Frente K Fuerza San Luis, que tiene como referente a Alberto Rodríguez Saá.

255 votos (43,66%) consiguió Martínez. Mientras que el Movipro sumó 23 (3,94%). Además se agregaron nueve en blanco y uno comando.

Martínez advirtió que el día de los comicios aparecieron votos firmados por otras personas que no eran las presidentas de mesa: “No reconocieron esas firmas como suyas”, expuso. También se detectaron “votos en cadena”, o sea pegados, los cuales “tuvieron de despegarse con tijeras”.

“Hay gente que hace cambios de domicilio y vienen a elegir por nosotros. No podemos tener una elección democrática en Renca”, insistió.