La boxeadora que denunció el robo del cinturón: “Nadie hizo nada, ni el intendente ni la secretaria de Deportes”

La denuncia que hizo la boxeadora de Jujuy generó un escándalo en el boxeo de San Luis, y la noticia se hizo nacional. Aseguró que cuando pidió que le devolvieran el cinturón que había ganado en Estados Unidos (en 2019), recibió malos tratos y la sacaron “a empujones” de los vestuarios.

“Lo llevé de buena fe, desde mi Salvador de Jujuy a Buenos Aires y de ahí a Villa Mercedes, para que tuvieran algo físico para presentar. Concurrí al pesaje y después se los dejé, aunque esa no era mi intención. Pero les pedí que me lo cuidaran como oro”, relató este jueves Brenda Carabaja, en diálogo con El Chorrillero.

Todo eso sucedió en la pelea donde Micaela Luján hacía la primera defensa del título mundial en el Palacio de los Deportes; evento que tuvo no solo el auspicio del intendente Maximiliano Frontera, sino de la secretaría de Deportes, y por eso una fuerte publicidad.

Luján le ganó a Nataly Delgado, y la presencia del cinturón era fundamental. Posó para todas las fotos. “Dejé que lo compartiera con su gente, con su familia, y después me acerco a pedirlo porque me quería ir al hotel”, recordó. Fue luego de eso que su palabra ya “no tenía valor”.

“Nadie hizo nada, ni el intendente (Frontera) ni la secretaria de Deportes (Cintia Ramírez), que estaba presente. Hice alusión de que haría la denuncia, porque eso era un robo, y el mismo policía que estaba ahí me dijo que él no vió y no entendía nada. Todos se quedaron callados, lloré de la bronca y de la impotencia. Todos avalaron la discusión sin fundamento que daba José Ahumada”, acusó.

“Ahumada se burló de mí delate de todos, y yo no voy a permitir que él ni nadie se meta con mi persona. Me decía irónicamente que me acompañaba a denunciarlo si yo quería”, añadió. Al mismo tiempo anticipó que su abogado se está encargando de llegar con el caso a la Federación Argentina de Box y al ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad de la Nación.

“Alguien tiene que defender mis derechos, y quiero que se sepa en el país la injusticia que hay a veces en el boxeo. Que la mujer no tiene respaldo y no existe el compromiso de las autoridades”, aseguró.

También explicó que los cintos tardan en llegar y que a Luján “no le costaba nada esperar un mes más hasta que le llegara”.

En conclusión, a la boxeadora jujeña no le quedó otra opción más que hacer “lo que ellos quisieron”.

“Quiero que esto no ocurra más, que la mujer tome valentía y que con el respaldo de una o dos pueda salir adelante. Esto no se lo merece nadie. Me costó casi 17 años conseguir el título, que más allá de lo físico es algo mío, que lo cuidé, y quedó sin su maletín. No tenía una mancha, y de repente pasó por 200 mil manos, es una falta de respeto total”, declaró en el programa Otra Dimensión.